Cuando una mentira que se repite miles de veces termina convirtiéndose en verdad, desde el campo de la psicología este fenómeno está definido como ilusión de verdad. [12] Una Distorsión de la realidad construida a partir de engaños. No es casualidad que el genio de la ciencia Stephen Hawking, nos indicara que el mayor enemigo del conocimiento no es la ignorancia, sino la ilusión de conocimiento. Mientras Albert Einstein nos señalaba que la diferencia entre el pasado, el presente y el futuro es solo una ilusión persistente.
Los métodos de Propaganda utilizados por Hitler y Goebbels distan mucho de ser un invento del nazismo, pero sí consiguieron perfeccionarlos, desarrollarlos e implementarlos a un nivel que no se había hecho antes de ese momento, dando origen así a los 11 Principios o Leyes de la Propaganda que hoy día son de uso común para influir en el comportamiento de la masa.
Entre las técnicas propagandísticas, el Miedo es el disparador inicial. Se informa a la gente que un desastre vendrá si no se sigue un determinado curso de acción. Ante este tipo de anuncio la atención es desviada de las consecuencias de las acciones propuestas y es enfocada en la prevención de la amenaza. Mientras más temor genere una comunicación, más probable es que provoque una acción preventiva. (El Covid-19, un “virus mortal y muy contagioso” -tasa anual mundial de mortalidad 0,03% [13]– que pone en peligro a toda la humanidad. Cuarentena obligatoria, privación de los derechos más esenciales, mascarillas como prevención de la vida y la salud hasta que llegue una vacuna que nos proteja de la amenaza global) La ley de Espoleta consiste en atacar el espíritu de las masas por la parte más débil e inesperada (La estrategia Covid vulneró los pilares fundamentales de la sociedad mundial con el fin de salvar vidas) La ley de la Sorpresa establece que la más eficaz mentira es una verdad a medias. [14] [15] [16] (Una enfermedad viral puede causar muchas muertes, por lo que es necesario restringir las libertades básicas para salvar vidas hasta tener una vacuna como protección segura)
Para lograr que el mensaje penetre en la mente de los receptores, se usa la ley de Simplicidad, haciendo que el mensaje sea lo más sencillo posible para que todos lo entiendan sin demasiado esfuerzo, quedando reducido a frases, símbolos y eslóganes. (Covid. Virus anda suelto. Quédate en casa. Cuídate. Cuídame. Cuidémonos. Casos. Muertes. Cifras. Vacunas que salvan vidas.) La ley de Síntesis sostiene que sintetizar es más importante que analizar. No es necesario explicar más de lo que la gente necesita oír, puesto que se guía más por la intuición que por el razonamiento. A través de este proceso se eliminan todos los matices complejos. (La Nueva Normalidad desechó todo razonamiento y protocolo epidemiológico conocido hasta el momento, silenció todo análisis y debate serio, repitiendo continuamente que la única gran amenaza para la humanidad es el Covid por sobre todo lo demás) A su vez, las leyes de Repetición, Saturación y Desgaste logran que las afirmaciones, las medias verdades y las ideas promovidas repetidas de forma continua, terminen siendo aceptadas, compartidas y naturalizadas por la audiencia, dando paso a la reorganización mediante la imposición de ideas. (Ya nadie se opone a las medidas completamente disfuncionales que se han implementado puesto que ya fueron aceptadas, naturalizadas, repetidas y defendidas por la población misma, impomiendose asi una nueva normalidad)
Señalar un enemigo, representa otra de las técnicas más importante de la Propaganda. Con ello se consigue desviar la atención sobre los errores y buscar sentido de integración grupal. Las opiniones no se combaten con opiniones ni los argumentos lógicos con argumentos. Las opiniones y argumentos se combaten con provocaciones dirigidas directamente a los sentimientos. Para quienes abrazan estas técnicas de Propaganda, terminan focalizando su odio en un enemigo común que se opone a los principios establecidos. (En la Era Covid, todo aquel que señale con argumentos lógicos las irregularidades médicas, científicas y sociales, inmediatamente es estigmatizado por los medios, los políticos y la sociedad como: fake news, anticuarentena, negacionista, terraplanista, conspiranoico, antivacuna, inconsciente, ignorante, fanático, terrorista, peligroso, provocador, asesino… Desechando, sesgando y distorsionando los fundamentos que ponen en evidencia las incongruencias de los procedimientos pandémicos impuestos, desviando así la atención sobre las devastadoras consecuencias que las medidas preventivas acarrean.)